30 de junio de 2016

Un gusto por lo medieval

Junio se nos va, chicas. Y se despide con muchísimo calor, aunque sea lo normal en esta época.

Hoy quiero enseñaros mis avances del cojincito que comencé hace unas semanas y del que os hablaba en esta entrada.


Está siendo muy agradable del bordar, en gran parte por el lino que estoy usando, que es un resto del que utilicé en su día para bordar el cuadro recordatorio de mi boda. Además se me ha ocurrido la idea de añadirle unos botones.


Ya he hecho una preselección, de cada uno de la foto tengo varios. Todavía no he decidido si pondré todos iguales o un mixto, iré probando.

Y aquí la tela de detrás.


Me parece que le irá bien, pero pasará como con los botones. Cuando tenga el bordado terminado, iré probando.

Esta mañana la hemos pasado con mi amiga Noelia, ha estado malita y queríamos ver como seguía. Y fijaros que regalazo me ha hecho.


Nos representa a mi hijo Alejandro y a mi, es obra de Paloma, la artista que nos regala su creatividad bajo el nombre de Mollygami. Un poquito más cerca.


Los papeles son artesanales y la técnica de doblado de papel, sencillamente impecable. Además del montaje de las figuras que tiene su misterio y porque.

Mañana mismo le busco un lugar de honor.

27 de junio de 2016

Un final es un nuevo comienzo

Buen lunes post electoral, espero que ayer fuérais a votar... 
y disfrutarais de las cervecitas de después.

Ayer por la tarde di las últimas puntadas a la bolsa de la que os hablaba en esta entrada. Ha sido un proyecto muy satisfactorio, porque solo había hecho otra bolsa con ese tutorial y me dio bastante guerra. Esta vez ha ido todo como la seda.


Así queda abierta.


Y así cerrada. Me gusta más.


Esta es la tela que va por dentro, elegí telas con colores parecidos de algodón americano, pero no recuerdo la marca porque las tenía desde hace bastante tiempo. La voy a usar para guardar la ropa interior cuando vaya de viaje y SEGURO que haré más.

Y ahora os dejo que voy a dar una vuelta por vuestros blogs. Llevo días sin pasarme.

23 de junio de 2016

Todo está en los libros

Hace ya unos días que tenía ganas de preparar una entrada sobre libros y, como he esperado tanto, me ha salido una larga no sobre un libro, sino tres.



El primero, La chica del tren, lo que podríamos llamar la típica lectura veraniega. Ligera, sin pretensiones, con una pizca de suspense, algo de sexo... Me costó engancharme al principio, también puede ser porque estaba releyendo uno de los libros de la saga Cazadores de sombras y saltar de un genero al otro parecía complicado. El caso es que ando por la mitad y está empezando a costarme cerrarlo.


Uno de los libros de ganchillo de mi colección, este genérico sobre mantas. Tengo dos mantas pendientes de terminar y me he propuesto no empezar ninguna otra hasta terminar al menos una. Ya la tengo elegida, aunque sea difícil.


Este es precioso y, como todas las mantas del libro, puede utilizarse también como echarpe.


 La combinación de colores de esta me parecen ideales para la habitación de un bebé o niño pequeño.


Este modelo aparece como cortina o visillo en el libro, pero yo creo que quedaría genial incluso como un adorno de pared.


En mi luna de miel estuvimos en Irlanda y uno de los sitios que visitamos fueron las Islas Aran. Allí son muy típicos los sueters de lana en color natural con un patrón que se repite en el pecho. Pues inspirado por este tipo de patrón, os muestro la última manta de la selección. Aunque parezca punto es ganchillo y nunca he probado este tipo y me encantaría asumir el reto.


Sé que se han puesto de moda los libro para colorear... y yo me he dejado llevar esta vez. Si no lo conocéis os diré que se trata de un libro precioso, pero precioso de verdad. He comenzado a colorear uno de los modelos que trae, pero creo que durante estas vacaciones le podré dedicar más tiempo. Mientras tanto he pasado muy buenos momentos ojeando las páginas e imaginando que combinación de colores utilizaría en cada uno. Ya os contaré este otoño

19 de junio de 2016

Bienvenidos a mi gallinero

Domingo, verano, calor...


...té  helado, ¡aaaaahhh!

Este fin de semana previo a las vacaciones de verano escolares, lo dedico a desansar y recuperarme de la fiesta de fin de curso del colegio. Hice tantos bocadillos, reparti tantas chuches y regañé a tantos niños díscolos que he necesitado un par de días para recuperarme. Pero nada de perder el tiempo.



Cada vez me gustan más los diseños de Tra La La. Es asombroso como con tan solo siete colores, el efecto GUAAAU pueda ser tan grande. Supongo que se llama talento.


La sencillez es casi minimalista, da gusto bordar estas cenefas de flores porque no cansa, no se hace repetitivo.


Me encantan los coloretes, dan ganas de pellizcarlos como hacen las abuelas.


Hubiera querido terminar la palabra Bienvenidos, para que al menos vierais como quedaba en castellano, pero no me ha dado tiempo. De hecho creo que si no llevase un mes de junio tan ajetreado hubiera acabado ya el diseño, porque se borda rápido, A ver para la próxima.

13 de junio de 2016

Tutorial y platos vintage

Comienzo la semana todavía con el susto en el cuerpo. El sábado por la mañana mi gato Bruno se cayó por la ventana de casa. Un tercer piso. Le encontramos agazapado en el jardín de enfrente, muy asustado y con sangre en la carita. Una vez en el veterinario, nos tranquilizó con el diagnóstico  de un metacarpio roto y nada más. ¿Creéis que ha escarmentado? pues no, ayer mismo le pillé tratando de salir a la ventana otra vez. Esta tarde vamos a comprar mosquiteras.

Hace unos meses estuvimos ayudando a vaciar una casa familiar para reformarla. Tiramos muchísimos trastos inservibles, reciclamos algunas cositas y nos llevamos algunas gratas sorpresas.


En realidad, más que una sorpresa fue un reencuentro. Porque en algunos de estos platos he comido cuando era pequeña. Aunque no me acordaba.


El rosa está bastante deteriorado, no me atreve ni a fregarlo porque tiene grandes grietas y le falta un trozo en uno de sus lados.


Esta es la parte de atrás del primer plato. Me explicó mi padre, que estos remaches metálicos se llaman lañas y se utilizaban para reparar platos. Esto se hacía, no tanto por el valor que tuviera la pieza (que también), si no porque si vivías en un pueblito de la sierra de Guadalajara en los años 40, 50... era complicado reemplazar las piezas rotas. Para ello tenías que ir a la ciudad y ese tipo de viajes eran incómodos, costosos y difíciles.


Los dos azules no estoy muy segura, pero puede que sean cerámica de Talavera. De nuevo tengo tan solo la información que me ha proporcionado mi padre, que recuerda verlos siempre en su casa cuando era niño, pero no sabe de donde salieron.


Esta fuente es la más simple y tiene algunas manchas que no salen, pero me parece una preciosidad.

Hace unos días encontré un tutorial muy práctico en internet para hacer toallitas de limpieza multiusos. Ayer me puse manos a la obra y, esta vez, si tomé fotos.

Lo primero que necesitamos en un rollo de papel de cocina de los resistentes. Con un cuchillo de sierra lo cortamos por la mitad, esto cuesta un poco así que le pedí a mi marido que lo cortara él porque tengo una muñeca abierta.

Una vez hecho esto, en un recipiente mezclamos 1/2 vaso de vinagre, 1/4 vaso de agua, 1/4 vaso de alcohol, 1 cucharada sopera de líquido lavavajillas y  8 - 10 gotas de aceite esencial cítrico. Como me quedé sin alcohol, utilicé colonia infantil y así me ahorré el aceite.

Ahora metemos uno de los medios rollos en un recipiente de plástico con tapa, yo compré uno específico en el chino pero se puede reciclar alguno de los que tiramos a la basura. Si lo hacéis así tened en cuenta que sea más o menos del tamaño del rollo de papel y, con un cutter, tendréis que cortar una cruz en la tapa por donde sacar la toallita.

Hecho esto, vertemos el líquido sobre el papel con cuidado de repartirlo bien.



Dejar actuar unos minutos y, con cuidado tirar del cartón que hay en el centro del rollo para sacarlo de todo. Deshechar.


Al tirar del cartón veréis que sale una de las porciones de papel, esa es la que debéis meter por la cruz que hicimos antes en la tapa. Yo opté por un recipiente con tapa de abrir y cerrar para que la toallita no se quede seca.


Pero va en gustos. En cuanto a los usos, son variados y seguro que cada una de vosotras le dará muchos más de los que se me han ocurrido a mi. Por cierto, usé vinagre de manzana que tiene un olor menos potente.


Desde aquí quería hacer llegar mis condolencia a las víctimas de la matanza de Orlando. A sus familias y amigos desearles fuerza y serenidad para afrontar semejante pérdida. Por mi parte, tengo serias dudas de si alguna vez conoceré un mundo donde los seres humanos seamos capaces de vivir respetando al resto de nuestros congéneres. Pero respetando con mayúsculas.

10 de junio de 2016

El tutorial gafado

¡Que calor hace!¡como ha entrado de fuerte este mes de junio! Necesito una cervecita YA.

Hace unos días os contaba en esta entrada como hacer un rosetón con un redondel de tela, adelantando además que era solo el comienzo de un trabajo más elaborado. Pues la verdad es que cuando me puse a verlo en más detalle, me di cuenta que no necesita el rosetón para nada... mi gozo en un pozo.

Peeeero como tenía muy claro que quería hacer el cuelgagafas, decidí comenzar de cero. Aun así, como parece que este tutorial está gafado, no iba a ser tan fácil. Desde el principio sabía que iba a utilizar las instrucciones que colgó Mami Garrido en su blog Cose y calla, del que soy seguidora desde hace tiempo. Y cual no sería mi sorpresa cuando, al meterme en su blog para poner el link al tutorial, no lo encontré por ninguna parte.

Aquí pondría un montón de smilies llorando a lágrima viva de los que salen en el whatups, pero no los tengo. Porque no me parece correcto poner las fotos del tutorial que se curró ella en mi blog y porque ya había hecho mi cuelgagafas y no había sacado fotos del proceso.

Dicho esto, he decidido poner las fotos de mi cuelgagafas ya terminado, del que estoy muy orgullosa y contenta.


La tela que Mami uso en su tutorial parece loneta, más recia que la que elegí yo. Hubiera estado bien que añadiese algún pétalo más a los seis originales para que me quedara más apretadito, pero se me ocurrió tarde.


En lugar de cordón o cola de ratón que fueron mis elecciones originales, opté al final por un lazo de flores en distintos tonos de lila


Dudé si utilizar un botón en un tono que contrastase con el color de la tela y el lazo, pero no me convencía ninguno y además tenía este con el tamaño ideal.


Y por último el broche. Hoy ya he ido al cole a recoger a mi hijo con el prendido de la blusa y le ha encantado a todo el mundo.

En cuanto a lo que haré con el rosetón... encontré por casualidad esta foto que me parece a la vez una chulada...


 ...y un trabajazo.

Buen fin de semana y no paséis mucho calor.

3 de junio de 2016

Desayunando con Margaritas 2

En la Calle Puebla de Madrid, en pleno barrio de Malasaña, hay un Café que lo llaman de la Luz.

Foto de Sandra G.S.

Donde da gusto ir a desayunar o pasar un ratito con amig@s. Que quien dice desayunar, dice un picoteo, un aperitivo o un capricho atemporal.

Foto de Sandra G.S.

Esta tosta de queso de cabra con cama de rúcula y mermelada de higo, tiene la culpa de que este año la primera mermelada del calor la haga con esta fruta tan veraniega y miel. O piñones. O pera. O vainilla... bueno, igual voy a tener que hacer más de una tanda.

Foto de Sandra G.S.

El encanto de los suelos de madera que crujen al pasar o de los estampados floreados adornando muebles descabalados y a los que han dado una segunda vida en un local lleno de encanto, con precios muy ajustaditos y un café de los de pedir dos tazas.


Si además llegas en una mañana soleada pero fría típicas del invierno madrileño, y lo primero que ves al entrar es ESA estufa, pues ya ni piensas en irte. Nunca.


Y yo no es que sea muy de jugar a las cartas, pero una tarde de mus si me pasaba acodada a esta mesa. En cuanto al entorno.


Pues para muestra, un botón.

1 de junio de 2016

¡Oh, las lunas de junio!

Hola chicas, hoy comienza junio que parece ser está dedicado a la juventud y a la diosa Juno. Para mi es especial porque hace quince años me casé con mi marido, así que este año celebraremos nuestras bodas de cristal.


¡Que bonito el color amarillo!

Tengo varios moldes, de cerámica la mayoría, para hornear mis pasteles y cuando alguno de ellos empieza a pegarse y a darme problemas, ¿adivináis para qué los uso? Efectivamente, para tener recogidos mis cachivaches. En este caso, mis cintas.


La mayoría son de Tilda, pero también hay algunas que he ido recopilando con el tiempo como la de cuadros vichy rojos que compré en la tienda Tiger. Muchas veces, cuando salgo a la terraza que es donde tengo mis cosas de costura y manualidades, me quedo mirándolo porque me parece precioso.


En cuanto al Sweet Flowers, pues ahí sigo como una arañita con su hilo, haciendo y deshaciendo. He pensado, ya que no tengo el gráfico, deshacer la flor de arriba e ir copiando de la de abajo. Y por fin una buena noticia relacionada con este bordado. He encontrado el gráfico de la cenefa que va abajo del todo y que todavía no había comenzado a bordar, así que cuando corrija lo que está mal, podré terminar la labor con un gráfico como es debido y todo será más fácil.