...Por fin he sacado un ratito para publicar una entrada. Y es que llevamos desde Navidades que la vida se pone por medio constantemente y no hay manera, pero los últimos quince días han sido de órdago.
Pero lo importante es que, por fin, puedo retomar mis "tareas informáticas", aunque lo que de verdad me apetece es ponerme al día con vuestros blogs.
Ya os imaginaréis que con tan poco tiempo los avances en mis labores se han resentido bastante. Así que hoy voy a publicar la entrada que tenía prevista para hace dos semanas, y que hablaba de como ahorrar dinero en la compra. Pero primero:
¡Feliz día de San Patricio, chicas!
A celebrarlo bebiendo y saliendo hasta altas horas de la madrugada
1.- Recorta en productos de limpieza: es una barbaridad la cantidad de dinero que me gastaba en esto, cuando además en muchos casos los resultados no eran ni mucho menos satisfactorios. Hasta que un día me planteé que tenía que haber una forma más barata y natural de hacer estas cosas. Nuestras abuelas no conocían a don limpio, es más, no le habría abierto ni la puerta de casa.
Las que seguís este blog, sabéis que siempre estoy buscando alternativas naturales a los productos que se comercializan en los supermercados. Y, básicamente, mi arsenal se compone de bicarbonato, jabón de lagarto, vinagre de limpieza y borax. Con esos cuatro ingredientes básicos (y alguno más, dependiendo de lo que queráis hacer) se puede hacer todo en casa.
Otro básico son las bayetas de microfibra. Son mágicas y solo utilizas agua para un montón de tareas.
2.- Haz una lista: cuando tengas que comprar, ya sean productos de limpieza u otras cosas, apunta en un papel lo que necesitas y limítate a él. Los supermercados estás organizados para hacer que gastes más de lo que tenías en mente... no te dejes tentar.
3.- Conoce los precios: no sé vosotras, pero yo hago una compra mensual siempre en el mismo sitio. Por ello es importante saber lo que valía el mes anterior el mismo producto, porque de otra manera compras por inercia sin fijarte en el precio y de un mes a otro puede haber subido sin que lo notes. Esto me ha pasado en Mercadona que, aviso a navegantes, se está subiendo a la parra con los precios últimamente. Hablo de 20 - 30 céntimos más de diferencia en algunos productos.
4.- Aprovecha las ofertas: mira las ofertas de todo lo que tengas en la lista, pero sobre todo de las cosas más caras como el detergente de la ropa si no lo haces en casa. Sobre todo si no eres fiel a ninguna marca. Pero no te dejes cegar por los carteles de ¡Ofertón!, ¡el precio más bajo!, etc.
Pasa a menudo con las garrafas de aceite de oliva. 5 litros 14 €, y cuando miras la botella de litro, esta sale a 2,40, osea, más barata.
5.- Planea las comidas: si haces un listado semanal de comidas y cenas, teniendo en cuenta lo que tienes en la despensa/frigorífico, ahorrarás dinero.
6.- Congela verduras: a veces me pasa que tengo cualquier tipo de verdura en el frigorífico y me olvido de ella... hasta que se echa a perder. Para evitarlo, ahora según compro en el mercadillo los jueves, limpio, corto, cuezo y congelo. No desperdicio nada y siempre tengo verdura a mano cuando la necesito. Solo hace falta acordarse de sacarlo con un poco de tiempo del congelador para consumirlo.
7.- Seguimos congelando: y, ya que estamos, ¡congélalo todo! Pan, mantequilla, huevos, zumo... si ves que no lo vas a usar y que se puede estropear, congélalo. Ya lo gastarás cuando haga falta.
8.- Comercios de barrio: es cierto que la compra grande la hago en un supermercado. Pero los perecederos, esos voy a las tiendas del barrio. Te conocen y te cuidan y suelen tener los precios muy ajustados precisamente por la competencia de las grandes superficies. Porque la calidad también es importante.
Nos leemos mañana chicas