28 de febrero de 2012

Tanto por contar y tan poco tiempo

Y es que hay días que no pasa nada y otros que te salen las cosas por las orejas. Para empezar algo alegre, hoy es mi aniversario de novios, 14 años juntitos y revueltos. No lo celebraremos pero anoche nos acordamos los dos casi a la vez.

Anoche mientras preparaba la cena, a mi pizquita le dio por rematar de cabeza (tropezó) contra el radiador de nuestro dormitorio. Resultado, se cargó el humidificador de cerámica y se cortó en la frente. Han sido sólo 2 puntos americanos y, dado que los cortes fueron en el nacimiento del pelo, si le queda cicatriz no se verá mucho. Pasado el susto, quería agradecer de nuevo que todavía hay gente con humanidad por el mundo, la señora que nos dejó pasar en urgencias del ambulatorio al vernos llegar acongojados y cubiertos de sangre (¡lo que sangran las heridas en la cabeza!) y a la doctora de SUMMA que se tomó con humor la patada que le dio mi angelito en el estómago mientras le limpiaba la herida.

Y ahora la entrada que tenía prevista para hoy. Hace unos meses decidimos comprar muebles nuevos para la habitación de Alejandro. Mi hermano se la pintó de color naranja, su favorito, y él decidió repintarla a los 15 días.


Así que para tapar la fechoría, compramos una lata de pintura de pizarra y nos propusimos dibujarle un dinosaurio, concretamente a Piecito, el personaje de las pelis En busca del valle encantado, que le encantan. Pero nos salió su madre con rulos y algo de celulitis.


A él le encantó que es lo importante. Y aquí viene la anécdota.

El día que pudo usarla comenzó a pintar huesos, me sorprendió un poco pero me puse a su lado a dibujar una tortuga y, al verme, grita horrorizado:

- No mamá, sólo puedes dibujar cosas de ESCATOLOGÍA.

Comprendereis mi sorpresa ya que dudaba que un mico de 5 años supiera el significado de la palabreja, así que le pedí que me explicara que era eso y me contesta:

- Es cuando unos señores escaban y sacan de la tierra los huesos de los dinosaurios.

PALEONTOLOGÍA, el niño hablaba de paleontología. En fin...


11 comentarios:

Arish dijo...

Que no se te olvide la " palabrita" porque cuando sea mayor le gustará recordar la anécdota; mi hija nos pedía con insistencia " mutazorra " y tardamos varios días en saber que era : " butifarra " nos reímos mucho cuando lo recordamos.
FELICIDADES POR EL ANIVERSARIO.

Lourdes dijo...

HAy palabras que no se olvidan, de mayor te ries al recordarlo, es sensacional.

Irene dijo...

Me quedo con tu anécdota, me encanta. Son geniales los niños. Mi hermana mayor, cuando yo nací, no dejaba de darme besos en los pecietes, le chocaban que los tuviera tan pequeñoa (ahora calzo un 41 y ya no me dice nada, sniff) De ella también es el palabro colocotón, que es su fruta favorita. Cuidadín con los remates en radiadores, siempre salen perdiendo las cabezs. Me alegro de que haya quedado en "poca cosa". La idea de la pizarra es genial. Y ¡Felicidades! por tu aniversario. Besos

Srta. Moneypenny dijo...

jajajjaaja, ay me he reido mucho con la mama dinosaurio con rulos y con lo de la escatología. Como son los niños.
Mi sobrino un día me viene corriendo "tíaaaaaa tengo una ladilla¡¡¡" y yo AYYYYYYYY UNA LADILLA????? si tía¡ y me saca la "ardilla" de la edad de hielo.
Pobrecita, y está mejor?? se asutaría mucho, pobrecita.

Susikiu dijo...

Con los niños uno no gana para sustos¡¡menos mal que solo son sustos..

ya me reí con la mama de piecitos, a mi me encantó, quedo estupenda

besos y gracias por hacerme reir

Cristina-Tejiendo las Horas dijo...

Que susto Olga! Pobrecillo, aunque esas cosas ,a esas edades ya suelen pasar...lo digo por experiencia!
La pizarra una idea geniál para tapar en "desaguisado".
Un beso guapa!

May dijo...

Muy bonita y muy buena idea la pizarra, respecto a la brecha, son heridas de guerra´que se quedan gracias a dios como anecdotas al igual que las palabrejas que se inventan.En fin esos locos bajitos...Bss May

Inés dijo...

jajajajajaja, me encanta la celulítica con rulos. Buen remedio para un gran desastre.
Y respecto al siniestro ... un buen susto y una herida de guerra que con el tiempo desaparecerá.
El vocabulario infantil no tiene desperdicio.
Mi hija en una hamburguesería después de oir cómo su hermana y primas pedían un perrito caliente quiso cambiar y sabéis que pidió? Un gatito caliente!!!!!!!!!!!! Después de 16 años seguimos riéndonos de la hazaña.

Angeles dijo...

Lo que te decía, con ese muñeco no aburres nunca :)
Un beso

Unknown dijo...

Mundiales!!!!!!!! los peques son Mundiales jajajajajajajaja

el remedio a la decoracion casera de Alejandro muy chula!
Espero que se recupere pronto de su herida de guerra jaja
Mimale muchoooooo

margal dijo...

Te ha quedado muy bien la pared y me alegro de que el accidente no sea nada, la verdad es que cuando uno ve tanta sangre siempre se asusta aunque luego no sea nada.

saludos