No fui tan racional. Sencillamente lo vi, me enamoré y me puse a ello. La terminé en tiempo record sin aburrirme, extraño porque lleva un sólo color y no muy alegre, la verdad.
Una vez acabado, llegó la tesitura. ¿Qué hago con él? No quería hacer un cuadro porque me resultaba pequeño, tenía pendiente hacer unos pañitos para las mesitas de noche de mi dormitorio, pero no me pegaba... en fin, no se me ocurría nada.
Finalmente me decidí a probar algo que no había hecho nunca antes. Parecía fácil y apenas requería materiales.
¡Ah, y esto también!
Y el resultado es este.
La carpeta ha quedado genial, es tan sencillo como forrar un libro del colegio gracias a la fiselina y la plancha. Queda super vistoso y, además, aproveché para limpiar de papelotes la carpeta. Pensé en ponerle algún aplique, pero el estampado de la tela (Companion Fabrics - Fasco: Vinery Flowers black) y la misma labor de punto de cruz me parece que adornan lo suficiente y no quería recargar más.
Y lo más importante, por fin saqué del limbo de las labores terminadas y sin usar a Miss Mary Mack.
6 comentarios:
¡Que chulo, Olga! Me gusta mucho Miss Mary Mack, voy a tener que revisar tus labores a ver que rapiño :P
Ya sabes que cuando quieras
Si no es muy grande, me gustaría hacerme una Miss Mary Mack. Y de paso este sábado te llevo tu dragón, que tiene mucho curro para mi. Aunque ahora que no voy a tener que estudiar lo mismo hasta me aburro.
Mmmm, se me está ocurriendo una idea. Tengo que maquinar cosas contigo.
Miedito me das maja
En directo mola mucho mas :)
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