15 de junio de 2011

Redoble y... ¡¡tachán!!

Parecía misión imposible, pero por fin se alinearon los planetas. Aquí tenéis enmarcado el SAL Mary Glover.


No sé si recordaréis la entrada donde comentaba que pensaba enmarcarlo yo misma. Bueno... pues no pudo ser, porque ninguno de los marcos que encontraba se ajustaba a las medidas de la labor. Cuando tuve que rendirme a la evidencia y lo llevé a enmarcar al sitio donde habitualmente llevo mis labores, resultó que hubo problemas con el marco que había elegido. Primero se equivocaron (menos mal que en el recibo habían puesto la referencia que yo les dije) y luego como no lo tenían en la tienda tuvieron que enviarlo a un taller y se retrasó dos semanas más. Pero, al fin, el pasado viernes lo pude traer a casa.

Me encanta el color oscuro de la madera, creo que da realce a la labor.


Y el efecto de la madera golpeada me encanta. En fin... que bien está lo que bien acaba... ahora ya sólo me falta colgarlo. Porque, os lo creais o no, todavía no tengo claro donde.

1 comentario:

Paloma dijo...

Ha quedado muy bien, me gusta mucho el marco